CHE, ALGUIEN HABLA DE NOS

"Llegué a la moda desde el interés por la forma en que la ropa se apropia de memorias: por los tapados de mi abuela con olor a fijador y naftalina, por los pantalones colgados afuera de las cárceles para mujeres en Perú, por la mancha de origen incierto en mi remera blanca, por la media sin dueño aparecida en mi cajón."

Es un muchacho inquieto. De eso no hay dudas. Lucio Castro tiene 34 años. Es cineasta, diseñador y casi médico (le faltó un año y medio para terminar en la UBA). Es porteño, pero vive en Nueva York desde el año 2000, cuando decidió dejar Medicina para irse a estudiar diseño de moda. Su carrera fue de vértigo en vértigo.

"Lloré un mes y medio cuando me di cuenta que podía hacer otra cosa y que incluso me podía ir bien sin ser tan estricto", confesó. "Y descubrí que la moda es una ilusión de cambio para una vida más feliz. Le interesan los detalles y sostiene que "la ropa para hombres necesita de una mirada más íntima. Los hombres no necesitan detalles exorbitantes. El secreto es ir descubriéndolos con el uso, con la cercanía. Los hombres son más fieles y sentimentales con la ropa que las mujeres. Además no les interesa tanto el glamour. Una mujer se prueba un vestido y se imagina cómo la verán. Un hombre se prueba un pantalón solo y decide solo si le gusta o no. Los hombres eligen siempre la comodidad. Son más prácticos y cuando encuentran su estilo son más fieles". Esta hablando de nosotros.

Chicos, este muchacho es además el inventor del calzoncillo invisible. ¿Invisible?. "Sí, los calzoncillos son una prenda que los hombres prefieren olvidar, por que los calzoncillos quedan bien si uno no los siente. Cualquier desajuste, demasiado grande, demasiado chico, etiqueta que raspa, elástico apretado, hace que uno se acuerde que está usando algo y esto es justamente lo que uno quiere tratar de olvidar. Traté de mejorar cada detalle. Y lo logré", sostiene orgulloso. Estas prendas intimas tiene la textura de la seda, pero son de algodón. Por fin alguien razona la moda y la comenta desde un discurso simple y cercano que se aleja de cualquier lugar común, tan usual en el insoportablemente pedante mundo fashion.

Lucio terminó la carrera de Dirección de Cine en Buenos Aires (C.I.C.) y en el año 2000 se mudó a Nueva York a estudiar Diseño de Moda en Parsons School of Design. Trabajó como diseñador para Marc Jacobs, DKNY y hoy es el director de diseño de Armani Exchange, la línea de ropa urbana y joven del emporio Giorgio Armani. En 2001 fundó, junto con la diseñadora Pekinesa Elaine Ho, el website http://www.iwishicoulddescribeittoyoubetter.net/ con la intención de documentar la ropa de todos los días y continuar un diálogo acerca de los alcances teóricos de la idea de vestirse, entre esos dos continentes. En 2008 escribió y dirigió el corto “Honey, We Shouldn’t Be Here” , seleccionado para el festival Newfilmmakers de Nueva York 2008, y actualmente está editando su nuevo corto “It Goes Without Saying” (2009), filmado en impecable b&n y en 16mm. Y estuvo de visita en Buenos Aires.